Para pensar antes de leer...
¿Cómo vives los días de la semana? ¿Afecta el paso de la semana a tu ánimo?
¿Qué cosas haces para que los días laborables también «cuenten»?
Y ahora, leamos el poema:
Sencillo, de Karmelo C. Iribarren
Verás,
es muy sencillo:
los lunes
martes
miércoles
jueves
viernes,
son la vida.
Los sábados
no son más
que una efímera ilusión.
Y los domingos
nos sirven
para encajar
bien
todo esto.
Este adviento de hoy cuestiona sobre el cómo abordamos el paso del tiempo semanal y la función de cada día. Mantener la frescura diaria en el tiempo laboral y en los momentos fuera de lo laborable supone un propósito a acometer. No existen tiempos inhábiles. En todos ellos, existen formas de cubrirlos con plenitud porque en el trabajo, tanto en la ocupación como en la relación social, hay tiempos auténticos. Y no digamos en el ocio, si eres persona conocedora de los ámbitos que puedes cubrir. Desde un tomar café a solas como en otro momento de libertad ara escoger del amplio abanico de posibilidades que ofrece el medio urbano o el rural a nivel individual como colectivo.