Qué será, esta cifra. Si digo 21 gramos diremos: el supuesto peso del alma. Si digo 15 años tal vez tarareemos la canción del Dúo Dinámico (sobre todo si tenemos una edad). Si digo 7 tal vez nos vengan los pecados capitales y si digo 10, los mandamientos. O yo qué sé.
Pues bien: 57 han sido los segundos que ha durado la llamada de seguimiento de mi tratamiento con antidepresivos con mi doctora. Ha incluido la presentación por su parte y la presentación del caso por la mía. Me ha dicho que me renovaba la receta. También le he preguntado cuánto tiempo tendría que mantener el tratamiento y me ha respondido.
Lo que no ha ocurrido ha sido que me haya preguntado cómo estoy, si estoy mejor, si me va bien la medicación, si estoy adaptada al trabajo (recordemos que tuve que estar de baja), en fin, cualquier pregunta que tuviera que ver con mi salud y bienestar.
Y luego que la salud mental nojequé y nojecuántos.
En fin.
¿Cuánto abanico abres en poco tiempo? Salen y surgen temas de manera permanente y yo, muy osado, voy a por ellos. “Elnosequé y nosecuántos” es indeterminación y planteamiento ante lo que nos sucede. De ello hemos hablado cuando tratamos la incertidumbre. El primer paso para superar el mal es aceptar que existe. Hay quien esconde la situación como si eso sirviese para algo. Acudir a terapia es preciso porque se necesita externalizar la situación como ayuda y como expresar, en el entorno que se desee, la cuestión que ocupa. La terapia combinada es necesaria en el momento que aparecen aquellos no sé qué porque la mayoría de los psiquiatras medican. ¿Dónde quedan los derechos de los pacientes? Un debate más que no solventa nada porque cae muy lejos de la persona sufridora. Hay alternativas en una segunda opinión, en profesionales consejeras y personas con las que tengo apego para levantar el ánimo. Y siempre ¡A por ella!
Yo no soy doctora, pero me interesa: ¿Cómo estás? ¿Que tal con la medicación? ¿Y la vuelta al trabajo?
Estoy mejor, la medicación está funcionando relativamente bien y la vuelta al trabajo, tan dolorosa como se supone, lo normal. Eres muy bonito.